INFANCIAS DE PALESTINA; LA VIOLENCIA COMO PROCESO DE SOCIALIZACIÓN.

Cómo la guerra afecta el desarrollo de los niños.

POLÍTICASOCIALPALESTINA

Por Chelsea Salazar

10/22/20257 min read

El proceso de socialización es el que forma la identidad, el que hace que percibamos la realidad de la forma en la que lo hacemos y el momento determinante, es en la niñez.

Las niñas y niños de Palestina, están viviendo ese proceso en medio de escombros y muerte donde el horror se ha vuelto costumbre, las afectaciones condenarán la historia.

Desde octubre de 2023, comenzó el genocidio en Palestina que actualmente prevalece y del que día a día se reportan nuevos sucesos los cuales continúan dejando de lado los derechos humanos, a pesar de que no podemos definir o cuantificar que acontecimiento ha sido más trágico, lo único seguro es que las niñas y niños son los principales en padecer las consecuencias. Desde los primeros bombardeos en la Franja de Gaza se ha destacado que de la población que ha muerto son en su mayoría menores de edad, a pesar de no tener la certeza de cuantos niños y niñas han sido asesinados, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia o United Nations International Children´s Emergency Fund (UNICEF) estimó para el pasado mes de agosto, más de 100 mil muertes de niñas y niños por desnutrición y hambre. No hay estudios que cuenten con exactitud, sin embargo, la cantidad es estratosférica aún sin contabilizar a las niñas y niños que han muerto por los bombardeos o ataques directos de los israelíes con armas de fuego.

La indignación ha sido notoria a nivel internacional; ha habido manifestaciones con diferentes temáticas y enfoques, diversos artistas han mostrado su apoyo a la comunidad de Palestina, mandatarios internacionales han comunicado su toma de decisiones en pro de la población palestina, se han organizado flotas a nivel mundial para llevar ayuda humanitaria, entre otras medidas para buscar detener el genocidio o los impactos de este, pero, a pesar de todo, Israel continúa con los ataques incluso para los que solo buscan ayudar. Sin minimizar las consecuencias para la población de Palestina de todas las edades y géneros, las niñas y niños están pasando por un proceso de socialización que se está creando a partir de las experiencias actuales en las que han estado inmersos lo cual nos lleva a muchos cuestionamientos que aún no tienen respuesta.

Proceso de socialización.

Se trata de un concepto que surge en el siglo XIX y que ha sido estudiado por múltiples autores de diferentes ramas de las ciencias sociales, tales como: George Simmel, Karl Marx, Talcott Parsons, Gordon Allport, Alfred Schütz, entre otros. Ha sido objeto de estudio desde entonces e incluso ha sido considerado como el estudio denominado “la nueva sociología de la infancia” realizado por los autores Allan Prout, Allison James y Chris Jenks. El proceso de socialización se trata del transcurso en el que un individuo aprende de normas, valores, roles, percepciones, creencias, comunicación con su entorno, etcétera.

Es el momento en el que un ser humano adquiere conocimiento de todo lo que le rodea y con base en eso, formará su criterio que lo llevará a múltiples tomas de decisiones a lo largo de su vida. Suele ser muy amplio y varía de acuerdo con la ubicación geográfica, la cual determinará la cultura los diferentes espacios y con ello, la moral que rige lo que se considera como “el bien” y “el mal”. A pesar de que, con los años, una persona puede cuestionar su proceso de socialización y con ello, modificarlo, este siempre estará impregnado del conocimiento adquirido y no podrá estarlo de algo que simplemente no se conoce.

El autor austriaco Alfred Shütz, en su libro “Fenomenología del Mundo Social”, aborda y explica la teoría de la fenomenología como un método en donde los seres humanos dan sentido a la vida cotidiana mediante la construcción de un mundo intersubjetivo, es decir, un mundo personal basado en el proceso de socialización, a todo esto, el autor lo denominó como la percepción de la realidad, en donde la razón y la verdad están sujetos a las experiencias personales.

Niñas y niños de Palestina.

El hecho de que el proceso de socialización y su percepción de la realidad se encuentre en las inmediaciones de un genocidio, implica muchos elementos de los cuales podemos hacernos múltiples preguntas. En redes sociales circulan fotos y videos del genocidio en Palestina, a pesar de que dicho contenido se torna impactante e incluso, difícil de observar, las redes han mostrado la verdad de la vida de las niñas y niños en la que se observa como su proceso de socialización se encuentra inmerso en la violencia, en presenciar la muerte constante y en el desapego de la cotidianidad con la que vivían.

Las niñas y niños han elaborado videos en donde se les observa hablando de cómo es su vida actualmente, de lo que sienten, lo que exigen e incluso realizando actividades de protesta y también actividades artísticas como música o danza en medio de los escombros. Es evidente que no es sencillo el acceso a internet, sin embargo, el contenido que comparten se ha vuelto viral y abre paso a un sinfín de escenas llenas de crudeza.

Asimismo, han circulado videos del trend “get ready with me” hecho por niños de Palestina, en donde muestran como es su día a día, sin poder estudiar y como deben buscar su comida, algunos videos muestran como elaboran alimentos o como van por ellos, en los que se observan las extremas carencias con las que intentan sobrevivir. Algunos menores y personas adultas han realizado portales en internet para obtener donaciones de todo el mundo y mediante cuentas de Instagram siguen a personas para buscar apoyo económico, cabe destacar, que muchos de los administradores de estas cuentas son niños y adolescentes.

La realidad actual.

Gracias a las redes sociales podemos tener un acercamiento a lo que viven las y los ciudadanos de Palestina con el genocidio, también podemos enterarnos de los ataques constantes, sin embargo, no existe la certeza de todo lo que han presenciado los niños y niñas de Palestina, se trata de un porcentaje reducido de una totalidad y si bien, las redes generan un apoyo en la información, no hay posibilidad de observar todo a través de las pantallas. Tratar de analizar cómo ha sido el entendimiento de las y los niños de Palestina puede tornarse muy complejo pues es una situación que no vivimos, por lo tanto, buscar comprender a nivel emocional lo que pudieron haber sentido los menores desde el primer bombardeo resulta imposible.

Lo que es un hecho es que el proceso de socialización de los menores fue invadido por la extrema violencia y han tenido que procesar sucesos devastadores de forma obligatoria sin importar la necesidad personal del tiempo de asimilación, es posible que exista una normalización de la muerte en cualquiera de sus formas sin dejar de lado el trauma y dolor con el que puedan cargar. Estos elementos generan apertura a preguntarnos hasta qué punto observar de forma constante las trágicas imágenes puede generar diversas condiciones de salud que puedan repercutir de múltiples formas, así como también el desarrollo obligado de una serie de responsabilidades que no son competentes para ningún menor en el mundo por aspectos físicos o mentales. Asimismo, el desenvolvimiento de los roles de género y como ahora los niños y niñas los percibirán independientemente de su cultura y tradiciones, las cuales, desde luego, ya fueron modificadas.

Las lágrimas, la solidaridad, la desesperación, el pánico y la impotencia ahora son colectivos y constantes. Las personas adultas posiblemente ya habían tenido un cuestionamiento a su proceso de socialización de forma consciente o inconsciente, posiblemente una o muchas modificaciones a sus pensamientos pues es el mecanismo natural como seres humanos con base en lo que vivimos día a día. Pero en este sentido, los niños y niñas de Palestina están teniendo ese proceso en este momento de sus vidas, a pesar de la crueldad con la que han tratado de sobrevivir y el horror de lo que han presenciado y que siguen presenciando, buscan continuar existiendo y vivir su niñez a pesar de que sea entre escombros y la muerte constante.

Aunque existe un sinfín de fundaciones y organizaciones dedicadas a la ayuda humanitaria especializada en menores, las niñas y niños palestinos no cuentan con un respaldo verdadero, ni siquiera con las intervenciones internacionales, el genocidio ha sido detenido. Resulta indignante que hay personas que consideran terroristas a las niñas y niños de Palestina y que merezcan morir de hambre o por un ataque con armas o bombas, incluso, hay personas sionistas (influencers, actores, políticos, etc.) que, de manera pública, han deseado la muerte de los menores de Gaza. El proceso de socialización de los menores en Palestina ha sido intervenido por una serie de acontecimientos que nunca serán olvidados, por sucesos horrorosos que desde luego generarán cambios en las ideologías, en las percepciones, en la salud y con ello, en lo que acontecerá en el futuro. El genocidio está marcando un cambio en la definición de “infancia” para el pueblo palestino, las brutales muertes de las niñas y niños de Palestina dejan una marca, que nunca se borrará en la historia del mundo y que condenará a muchas generaciones por muchos años, incluso siglos.

Fotografía: Mahmoud Issa, 2025.

Fotografía: Radamán Abed, 2025.

CHELSEA SALAZAR

COLABORADORA

Lic. en Sociología por la Universidad Nacional Autónoma de México.

Sigo buscando expresar en el formato que sea posible; actuación, danza y literatura, es lo que da respuesta en mi búsqueda de libertad. Me encanta el cine de terror, los gatos, los tacos y el color rosa.